sábado, 1 de febrero de 2014

Reencarnación en "Camino, Verdad y Vida"



REENCARNACIÓN


Por tanto, si tu mano o tu pie te escandalizasen, corta y tíralo lejos de tí; mejor es entrar  en la vida, cojo o lisiado, que tener las dos manos o pies y ser lanzado al fuego eterno".- Jesús (Mateo, cáp 18,versículo 8).

Unicamente la reencarnación esclarece las cuestiones del ser, del sufrimiento y del destino. En muchas ocasiones nos habló Jesús de sus bellos y sábios principios.
Este pasaje de Mateo es sumamente expresivo.
Es indispensable considerar que el Maestro se dirigía a una sociedad estancada, casi muerta.
En el concierto de lecciones divinas que recibe, el cristiano, en rigor, apenas conoce de hecho, un género de muerte, la que sobrevive la conciencia culpable por el desvío de la Ley, y los contemporáneos de Cristo, en que la mayoría, eran criaturas sin actividad espiritual edificante, de alma endurecida y corazón paralítico. La expresión "mejor te es entrar en la vida", representa la solución fundamental.. ¿Acaso los oyentes no eran personas humanas?. Por eso, se refería el Señor a la existencia contínua, a la vida de siempre, dentro de la que todo espíritu despertará para su glorioso destino en la eternidad.
En cuanto a la imagen del "fuego eterno", inserta en las letras evangélicas, es recurso muy adecuado a la lección, porque cuando no se dispone la criatura a vivir con Cristo, será impelida a hacerlo a través de mil medios diferentes; si la rebeldía perdura por infinidad de siglos, los procesos purificadores permanecerán igualmente como fuego material, que existirá en la Tierra en cuanto su concurso perdure en el tiempo, como utilidad indispensable a la vida física. 

( Obra: Camino, Verdad y Vida- Francisco Cándido Xavier / Emmanuel )


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         ¿ Qué es la energía sexual?

No es una energía diferente a las demás energías que actúan en el Ser humano, pues no hay mas que una sola energía cósmica que en el Ser humano adopta la variedad de “Prana” o energía vital del cuerpo físico, así como de energía psíquica , que es la energía que utiliza el alma para su manifestación; estas fluyen y se captan a través de los diversos Chacras que las regulan, en particular el 1º Chacra en la base de la columna, llamado “Kundalini”.
Cuando lo hace por el chacra que regula la sexualidad, ( el citado kundalini), el “Prana” se torna en la modalidad de energía que conocemos como Líbido, que regula los niveles de deseo sexual instintivo, despertando la producción hormonal de los órganos sexuales, siendo común y semejante en todos los animales.
En el ser humano, la falta de control de esta energía, puede hacer que esta venga a ser un factor esclavizante para el Espíritu al desviarlo frecuentemente de aquello para lo que ha venido a este mundo, fijándolo a la carne mediante la atracción sexual animal de instinto ciego .
Es de señalar que esta misma energía, mediante la educación y el ejercicio de la voluntad, también puede activar aspectos de creación mental o artística, pues tal y como lo ha demostrado la Psicología Estructural y el Psicoanálisis, el impulso sexual es la acción de una energía psicofisiológica que se puede desviar mediante el impulso de nuestra voluntad hacia una actividad mental o creativa.

- Jose Luis Martín-
                                                           
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Ser casto es saber utilizar la energía sexual y no ser utilizados por ella”

Cayetano Arroyo- (Diálogos con Abul Beka)

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           LAS MUCHAS CARAS DE LA OBSESIÓN



De entre las muchas psicopatologías graves de origen obsesivo,que afectan a la infancia, la más preocupante se presenta principalmente cuando los desencarnados adversarios acompañan al niño y durante el sueño se presntan espiritualmente,en el instante del desprendimiento parcial, haciéndole recordar los deslices morales del ayer, razón por la cual  retrocede hasta su cuerpo, bajo pesadillas atroces, con gritos y temores, que, con las persecuciones futuras, las fijaciones enfermizas se van instalando, transformándose en lamentables subyugaciones. La criatura obsesada presenta comportamiento diferente, incontrolable, mostrándose ,ya agresiva, ya depresiva y, muchas veces, intentando la autodestrucción. En esos casos, el mecanismo terapeútico es muy complejo, por una enorme ausencia de cooperación consciente del enfermo infantil.
El  pase magnético es recomendable por envolver al doliente, en vibraciones de bien estar,de armonía e incluso neutraliza las  descargas magnéticas negativas capaces  de alcanzarlo.
Otras persecuciones espirituales complicadas, envuelven espíritus vengadores, conscientes
de la condición de desencarnados, que saben bien lo que hacen y se complacen en eso. El apartamiento de esas criaturas no es nada fácil. Dominados por el odio, se muestran  intransigentes, irreductibles, cristalizados de sentimientos inferiores y son refractarios a todo tipo de intento de esclarecimiento. Muchos obsesores son hábiles e inteligentes, perfectos estrategas que planean cada paso, y acompañan a las "víctimas" por algún tiempo, observando sus tendencias, sus relaciones, sus ideales. Identifican sus puntos vulnerables (normalmente en el área del comportamiento sexual), y los exploran sin piedad.
Los problemas de salud física también son campos fértiles para sembraduras obsesivas. Como una máquina, nuestro cuerpo se encuentra sujeto a desgastes naturales, porque muchos obsesados no saben utilizarlo de forma correcta. En ese sentido, los perseguidores del Más Allá, saben explorar, hasta que el enfermo llegue a una patología de difícil diagnóstico. El estado de obsesión procede de la intimidad del hombre, exteriorizándose con tormentos físicos, mentales y emocionales. Sus ingredientes de causa, se remontan a vidas pasadas de resbalones y caídas morales. Pasiones, odios, fanatismo, avaricia y muchos otros factores, son las fuentes generadoras de la obsesión, que actualmente se ha constituido en uno de los mayores flagelos de la humanidad. Visitado por los obsesados, el Cristo penetraba
psiquicamente en las causas de su inquietud, y usando de su autoridad moral, libertaba tanto a los obsesores como a los obsesados, permitiéndoles despertar a la Vida, animados para la recuperación y la pacificación de la propia conciencia.
El Cristo no liberó a los obsesados, sin imponer la intransferible necesidad de renovación íntima, ni expulsó a los perseguidores inconscientes, sin enseñarles el camino hacia Dios. En cualquier proceso de orden obsesivo, la parte más importante del tratamiento está reservada al paciente. Su fijación por permanecer en desequilibrio, constituye obstáculo de difícil superación en la terapia de renovación. La terapia espírita  es la del invite al enfermo para la responsabilidad, invitándolo a un análisis honesto, de modo que él pueda descubrir, en definita, sus faltas. Ante el acoso de los perseguidores espirituales, la propuesta terapeútica del Evangelio, es la única portadora de elementos de legítima liberación; por tanto, Cristo es el gran libertador a Quien todos debemos recurrir, auxiliando a los dolientes del alma, que transitan extraviados, fuera de la masa corporal. En Su permanente energía amorosa, consciente de Su misión, Jesús enseñó que el más poderoso antídoto contra la obsesión es el amor, por la experiencia de la caridad, la abnegación y el acrisolamiento de ideales. En cuanto las luces de los archivos culturales parecen debilitadas por los desvaríos sexuales; por las sustancias psicoactivas; por la sed de posesión material, la Doctrina Espírita llega al mundo, apuntando nuevos métodos de paz para los que sufren los resabios amargos de la obsesión. Esforcémonos por la vigilancia constante, para que nos libremos de las venganzas de las obsesiones, en el firme propósito de modificación de hábitos y  actitudes negativas, ingresando en el seno de los valores ennoblecedores de la vida, por la efectiva renovación íntima.
  Jorge Hessen


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