Primeros acercamientos a la Postvida (1ª)Nuestro post de hoy está dedicado a todos los visitantes que
acaban de comenzar a interesarse por la vida después de la muerte física o, como aquí la llamamos, la postvida. De la mano del Dr. Vicent Guillem (Químico del Servicio de Hematología y Oncología del Hospital Universitario de Valencia) y de su libro “Las leyes espirituales”, nos adentraremos poco a poco, a lo largo de varios posts especiales, en este tema de una manera muy sencilla, al alcance de cualquier lector sin experiencia en esta temática. Esperamos que os sirva.
No sé por dónde empezar. Muchas veces me siento vacío, solo e incomprendido ¿Por qué me pasa esto?
Es normal y a mucha gente le pasa. Es porque vivís en un mundo con mucha falta de amor, estando unos de espaldas a otros. Y es cierto que uno puede estar solo en el mundo, aunque tenga mucha gente a su alrededor, porque el sentimiento de soledad parte de no sentirse amado,de no sentirse comprendido.La mayoría de gente de vuestro mundo se ha acostumbrado a vivir así, sin sentir, en soledad interior, en ausencia de amor verdadero. Creéis que estáis solos porque todavía no habéis tomado conciencia de que todos vosotros sois hermanos, que compartís un mismo destino y que os necesitáis los unos a los otros para poder alcanzarlo.
¿Y cúal es ese destino común que tenemos que alcanzar?
La felicidad verdadera, que sólo es posible alcanzar a través de la evolución en el amor. El amor es lo único que puede llenar el vacío del interior. ¿Hay algo que te inquiete especialmente?
La pregunta fundamental, que me atormenta constantemente es ¿por qué existo y para qué? ¿Para qué he nacido? ¿He venido a hacer algo? Porque no sé lo que he venido a hacer.
Has venido a evolucionar.
¿Qué quieres decir con evolucionar? ¿Evolucionar en qué?
Al proceso de transformación del egoísmo en amor es a lo que llamo evolución. Evolucionar significa aprender a amar.
Me hablas de evolución en el amor. Pero no es amor lo que yo veo en el mundo. ¿Por qué el sufrimiento? ¿Por qué vivimos en un mundo que tiene tantas contradicciones, desde lo más bello hasta lo más atroz y destructivo? El odio, las guerras, el hambre, la miseria, el sufrimiento. No puedo entender qué sentido tiene todo esto. ¿Tiene algún sentido, o se lo busco pero no lo tiene?
Sí tiene un sentido, evolucionar. Todas esas calamidades de las que hablas tienen un mismo origen, la ausencia de amor, llamémosla egoísmo. Igual que la suma del egoísmo de cada persona puede hacer del mundo un auténtico infierno, como ocurre en la actualidad, cuando ese egoísmo se transforme en amor, la suma del amor de cada persona transformará el mundo en un paraíso. En vuestra voluntad está el transformaros interiormente desde el egoísmo al amor, y si lográis el cambio interior, entonces el exterior, lo que os rodea, el mundo entero, cambiará como lógica consecuencia de ello. El mundo físico en el que estáis, está ahí para ayudaros a experimentar en ese proceso de transformación. Es como la arcilla para el niño que quiere aprender a modelar.
Sigo sin entenderlo ¿Evolución para qué, hacia dónde? ¿Qué sentido tiene todo ese esfuerzo si, al fin y al cabo, todo eso se va a terminar con la muerte?
La evolución de cada ser hacia una mayor capacidad de amar, de sentir y de saber, hacia mayores cotas de felicidad, no termina nunca, de lo contrario, no tendría sentido.
¿Qué quieres decir con esto?
Que el ser nunca deja de existir, es decir, es inmortal.
¿Cómo puedes decir eso si cada día vemos como mueren miles, millones de seres humanos?
Lo que muere es sólo el vehículo que utiliza el ser para manifestarse en el plano físico, es decir, su cuerpo físico. Su esencia, su conciencia, continúa existiendo.
¿Quieres decir con esto que existe la vida después de la muerte?
Sí. En realidad lo que quiero decir es que la muerte no existe, y que lo que se descompone es sólo el vehículo que utiliza el espíritu para manifestarse en el plano físico.
¿Y qué es el espíritu?
El espíritu es el ser que existe, que vive y siente. En el espíritu es donde reside la voluntad y la conciencia individual, que jamás se destruye. Tú eres un espíritu. Todos vosotros, humanos, sois espíritus, sólo que ligados a un cuerpo material durante algunas temporadas a las que llamaremos encarnaciones. Creéis que sois vuestro cuerpo físico, pero éste es sólo el vestido que necesitáis para poder actuar sobre el mundo material.
A ver si he entendido bien ¿Entonces quieres decir que el espíritu, o sea, nosotros, podemos existir de forma independiente del cuerpo?
Sí, y es lo que ocurre después de la muerte. El espíritu se separa completamente del cuerpo físico y continúa existiendo, viviendo.
¿Y no puede morir el espíritu?
No, el espíritu es inmortal. Puede evolucionar, cambiar a mejor, o estancarse, pero jamás destruirse.
Ya, pero ¿qué pruebas tenemos de que exista vida después de la muerte del cuerpo? porque, que yo sepa, nadie ha vuelto para contarlo.
Perdona que te contradiga, pero esa afirmación no es totalmente cierta. Existen miles de
testimonios de personas que estuvieron clínicamente muertas y fueron reanimadas. Muchas de ellas recuerdan haber vivido ciertas experiencias bastante fuertes y reales para ellos durante ese periodo de tiempo en el que estuvieron físicamente muertas.
¿Y estas vivencias que cuentan no pueden ser producto de una alucinación por el estado tan crítico en el que se encontraban?
Pues debe ser entonces una alucinación colectiva en la que todos se han puesto de acuerdo en alucinar lo mismo, porque todas estas personas están contando la misma historia [...]
¿Y cuál es esa supuesta historia común que están contando?
La separación del cuerpo físico y la visión del propio cuerpo desde fuera. La sensación de viajar a través de un túnel oscuro, al final del cual se percibe una luz intensa.El encuentro con familiares o amigos anteriormente fallecidos.Un diálogo con un ser luminoso.La visión retrospectiva de la propia vida... Hasta experimentar el regreso al cuerpo, con un posterior cambio de valores vitales y una nueva percepción del fenómeno de la muerte. Son personas que dejan de tener miedo a morir porque ya han experimentado que la vida continúa y que lo que viene después es mucho mejor que lo
que dejan.
Bueno, creo que son impresiones que no dejan de ser subjetivas.
Analizados aisladamente y de manera superficial es muy fácil desacreditar estos testimonios.
Pero cuando algún fenómeno se repite, con unas características tan notablemente parecidas, independientemente del país, la cultura y las creencias previas, tanto en adultos como en niños, creo que al menos invita a que se haga un estudio serio al respecto. Existen investigadores muy serios y reconocidos de vuestro mundo que se han dedicado a estudiar concienzudamente las experiencias cercanas a la muerte, y a recoger los testimonios de estas personas, como el Psiquiatra y filósofo norteamericano Raymond Moody, o el médico pediatra e investigador en neurología Melvin Morse, que han tenido este tipo de experiencias, entre muchos otros. Te aconsejo que te leas sus libros "Vida después de la vida" y "Más cerca de la Luz".
Aun así me parece un soporte poco consistente, casi accidental, para utilizar como prueba de la existencia de vida después de la muerte. Proporcionalmente, existen pocos casos de muerte clínica y reanimación respecto a los que mueren y no vuelven.
Existen muchos más testimonios, precisamente de personas moribundas, que están en proceso de separación definitiva del cuerpo, al que llamáis muerte, porque durante este proceso muchas de ellas afirman ver y conversar con sus seres queridos ya fallecidos o con otros seres luminosos que les preparan para la transición al otro lado. En casi todas las familias alguien recuerda un testimonio de estas características sucedido a algún familiar ya fallecido. Pero normalmente se suele creer que está alucinado. Nuevamente parece ser que cuando se acerca la muerte, todo el
mundo se pone de acuerdo para alucinar lo mismo en todas partes del mundo.
También han habido muchos estudiosos, como la prestigiosa psiquiatra Elisabeth Kübler-Ross, que se han dedicado a estudiar en serio este tema. Te invito a que leas su libro La muerte, un amanecer.
Pero todos estos son casos de personas que, aunque hayan estado cercanas a la muerte, están físicamente vivas.
También existen los testimonios de personas que contactaron con seres no encarnados, más frecuentemente con seres queridos fallecidos recientemente, que se despiden de ellos en sueños muy vívidos o en apariciones a pie de cama. También éste es un caso bastante frecuente,
aunque menos estudiado por los investigadores. […]
¿Quieres decir entonces que el espíritu existe antes de nacer y que ha vivido otras vidas?
Así es. Y en la actual vida física, las circunstancias y pruebas que el espíritu se encuentra están estrechamente relacionadas con las decisiones que tomó en las vidas físicas pasadas, y en el periodo de vida entre encarnaciones, no ligado a un cuerpo físico.
¿Y qué pruebas tenemos de que existan vidas anteriores, es decir, de que exista la vida antes del nacimiento?
Existen los testimonios de personas que tienen recuerdos de vidas pasadas, que pueden ser espontáneos (sobre todo en niños) o inducidos través de hipnosis regresiva. Hay bastante bibliografía al respecto. Respecto al recuerdo en niños, te recomiendo que leas el trabajo del Dr. Ian Stevenson, un médico psiquiatra canadiense,que se dedica al estudio de lossupuestos casos de reencarnación en aquellos niños pequeños que "recuerdan" una "vida anterior". En la actualidad lleva estudiados más de 2500 casos de
posible reencarnación en todo el mundo. Ha publicado más de 20 libros y diversos artículos en revistas especializadas de Psicología y Psiquiatría.
Te recomiendo su libro Veinte casos de reencarnación comprobada, que
hacen pensar en la reencarnación.
¿Y no puede ser todo esto fruto de la imaginación?
Admitiendo que haya casos que puedan ser fruto de la imaginación o de alguna alteración psíquica o de cualquier otra razón, existen muchos otros en los que las personas recuerdan detalles muy concretos de la vida pasada anterior que han sido históricamente comprobados. Recuerdan lugares, acontecimientos, nombres, con mucho detalle, muchos de ellos vividos en países en los que la persona jamás ha estado en su vida actual. Los casos más llamativos son aquellos que suceden en niños de corta edad, que pueden incluso hablar espontáneamente en un idioma al que jamás han estado expuestos en la vida actual, siendo éste un recuerdo del idioma que hablaron en la vida anterior. Suelen ser niños de entre 2 y 4 años de edad, que empiezan a hablar a sus padres o hermanos de una vida que tuvo en otro lugar y en otro tiempo. El niño suele sentir una atracción muy fuerte hacia los hechos de esa vida y con frecuencia insiste a sus padres en que lo dejen volver a la familia en la que afirma haber vivido anteriormente […]
¿Y es necesario morirse o vivir una experiencia cercana a la muerte para experimentar la conciencia de que tú eres tu espíritu y no tu cuerpo?
No. De hecho todos vosotros tenéis la capacidad de separaros temporalmente de vuestro cuerpo y así sucede de forma inconsciente en una etapa del sueño. Pero hay gente que es capaz de conseguir inducir esta separación de forma consciente a través de ciertas técnicas de relajación.
Los viajes astrales aportan pruebas de que la conciencia no está ligada al cuerpo.
¿Qué es un viaje astral?
Es una separación temporal del cuerpo […]
¿Quieres decir que, no sólo podemos vivir sin estar ligados a un cuerpo, sino que
estando físicamente vivos podemos salir y volver del cuerpo sin que se produzca la
muerte?
Así es.
¿Qué es lo que se separa exactamente?
Se separa el espíritu del cuerpo físico que, como ya he dicho, sólo es un revestimiento que se utiliza para poder actuar en el mundo físico. Sin embargo, esta separación es solo temporal y siempre existe un nexo entre los dos que nunca se rompe y que permite la vuelta al cuerpo físico sin que haya ningún tipo de problema de salud. Es el llamado cordón de plata.
¿Qué es el cordón de plata?
Es el nexo de unión entre el cuerpo astral y físico, como un cordón umbilical que permite aportar al cuerpo físico la energía vital que necesita para continuar con vida en ausencia del cuerpo astral.
Los clarividentes suelen describir este "cordón" como una especie de hilo muy elástico de tono plateado, extensible hasta el punto de que por mucho que se separe el cuerpo astral del cuerpo físico, el cordón siempre da de sí lo necesario, es decir, se alarga hasta grandes distancias cuando el espíritu se separa y viaja lejos del cuerpo físico.
¿Y dónde va el espíritu cuando se separa del cuerpo?
Donde su pensamiento le lleva, al mundo astral, y ese es un viaje natural que responde a una dinámica necesaria en el desarrollo humano. Esas visitas nocturnas procuran a la persona energías y experiencias que le ayudan más tarde en su vida física, puesto que allí es asistido por entidades espirituales más avanzadas que le aconsejan y guían. Si quieres saber algo más, te aconsejo que leas el libro El viaje astral de Oliver Fox.
( Círculo de búsqueda)
*********************
Ningún sufrimiento, en la Tierra, será tal vez comparable al de aquel
corazón que se incline sobre otro corazón helado y querido que el
ataúd transporta para el gran silencio.
Ver la nube de la muerte estamparse, inexorable, en la fisonomía de los que más amamos, y cerrarles los ojos en el adiós indescriptible, es como despedazar la
propia alma y proseguir viviendo…
Digan
aquellos que ya estrecharon en el pecho a un hijito transfigurado en
ángel de
la agonía; un esposo que se despide, procurando en balde
mover los labios mudos;
una compañera, cuyas manos consagradas a la
ternura penden extinguidas; un
amigo que se cae desfallecido para no
erguirse más, o un semblante materno
acostumbrado a bendecir, y que
no consigue expresar nada más, sino el dolor de la
extrema
separación, ¡a través de la última lágrima!
Hablen
aquellos que, un día, se inclinaron, abatidos de soledad, al frente
de una
tumba; los que se arrojaron en oración en las cenizas que
recubren el último
recuerdo de los entes inolvidables; los que
cayeron, pasando de la salud, cargando
en el seno el ataúd de los
propios sueños; los que tantearon, gimiendo, la losa
inamovible, y
los que sollozaron de angustia, en lo adicto a los propios
pensamientos, preguntando, en vano, por la presencia de los que
partieron…
Todavía,
cuando semejante prueba le toque a la puerta, reprima la
desesperación y
diluye la corriente de la amargura en la fuente viva
de la oración, porque los llamados
muertos son apenas ausentes y las
gotas de llanto les fustigan el alma como lluvia de
hiel.
También
ellos piensan y luchan, sienten y lloran.
Atraviesan
la faja del sepulcro como quien se desprende de la noche, pero, en la
madrugada del nuevo día, se inquietan por los que quedaron... Les
oyen los gritos y
las suplicas, en la onda mental que rompe la
barrera de la gran sombra y se
estremecen cada vez que los lazos
afectivos de la retaguardia se rinden a la
información o se vuelcan
para el suicidio.
Se
lamentan en cuanto a los errores practicados y trabajan con ahínco,
en la
regeneración que les habla al respecto.
Estimúlate
a la práctica del bien, repartiéndote los dolores y las
alegrías.
Prejubílense
con sus victorias en el mundo interior y consuelate en las horas
amargas para que no te pierdas en el frío del
desencanto.
Tranquiliza,
de ese modo, a los compañeros que piden el Más Allá, soportando
valientemente la despedida temporal, y hónrales la memoria, abrazando
con nobleza
los deberes que te legaron.
Recuerda
que, en el futuro próximo que imaginas, respirarás entre ellos,
comulgándoles las necesidades y los problemas, por cuanto terminarás
también el
propio viaje en el mar de las pruebas redentoras...
Y,
venciendo para siempre el terror de la muerte, no nos será lícito
olvidar que Jesús, nuestro Divino Maestro y Héroe de la Tumba
Vacía, nació en una noche oscura, vivió entre los infortunios de
la Tierra y expiró en la cruz, en una tarde pardusca, sobre un
monte
empedrado,pero resucitó a los cánticos de la mañana, en el fulgor
de un jardín.
Emmanuel
- Espíritu
(“Religión
de los Espíritus”, 58, Francisco C. Xavier, FEB)
*******************************
Hay clarividentes que, con independencia de
que ellos lo deseen o no, pueden a modo de intuición, percibir a
grandes rasgos acontecimientos futuros con el fin de poder cambiar a
veces
una realidad presente que pueda modificar ese futuro visto o
intuido.
El sentido de tiempo pasado, presente y futuro, lo tenemos en esta
dimensión física nuestra, pero no así en el Plano espiritual, en
el que todo permanece en un permanente y eterno presente.
El tiempo no es algo que pasa y nos envejece, sino un
camino mas o menos largo que cada uno recorremos por la vida física,
momento a momento, a través de un eterno y constante presente.
El
pasado supone el tramo del camino que ya hemos recorrido y al que ya
no regresaremos nunca más, por lo que aunque existió cuando era el
presente, en el instante siguiente ya solo es recuerdo pasado y
nunca más realidad. El presente es el punto del camino en donde nos
encontramos en cada momento, y el futuro es el tramo del camino
que aún nos falta por recorrer pero que en realidad es algo que
todavía no existe ni ha existido nunca . Sin embargo, ¡el camino
que recorremos en la evolución como en la vida, es uno solo, y
siempre el mismo!.
Por eso en nuestra dimensión física solo conocemos el
tramo recorrido al que ya no podemos retroceder, (pasado) y el tramo
en el que transitamos ahora en este instante,(presente), pero no vemos el tramo que nos queda porque no existe aún; en realidad solo
existe un eterno presente .
El auténtico Clarividente,
no es un médium,aunque puede coincidir otra facultad propiamente mediúmnica, pero si que es un gran sensitivo que
conectado con el Plano Espiritual, puede ver todo el camino o gran
parte del mismo, incluso en algunas ocasiones el del futuro previsto, aunque solo a grandes rasgos, porque el futuro depende de
cada acto del presente.
Lo que resulta obvio es que si en nuestra dimensión y
plano físico, el futuro nos está naturalmente velado y no se
conoce, es porque si pudiésemos conocerlo, ello nos condicionaría y nos quitaría la libertad al perder la motivación por esforzarnos
a crearlo en cada momento del presente.
La facultad conocida como
Psicometría o Profecía
por la que se “lee” o se penetra en el futuro de otra persona,
percibiendo los acontecimientos a grandes rasgos, es bastante rara y puede ser activada tan solo por el contacto del “psíquico”, con
el aura psíquica de otra persona, o incluso con un objeto personal
de esa persona que se encuentre “impregnado” de su energía
psíquica.
En todo caso, tengamos presente que el futuro individual lo tenemos cada uno en nuestras manos y depende de lo que hagamos en nuestro presente de cada día y cada momento. A nivel de sociedades, países y naciones, en todo el globo planetario, ese futuro será la resultante de los actos de cada día, de todos los seres humanos que poblamos el planeta. Así, no echemos la culpa a Dios si el futuro global o el individual son malos, porque eso será obra nuestra, y a su vez, si el futuro es feliz, agradezcámoslo a Dios, porque nos ha dejado el mérito de esa cosecha de felicidad que antes hemos tenido que sembrar en nuestro presente.
Siempre han existido y existen muchos charlatanes y
embaucadores que intentan vivir del engaño haciendo creer a los
demás en sus “poderes” falsos. Pero sin embargo, bien es cierto que han existido Profetas auténticos, que sin ellos pretenderlo, a
veces les ha llegado a la mente como un “fogonazo” de imágenes
o presentimientos que ni ellos mismos saben muchas veces interpretar
. Es de resaltar que la mayoría de las veces, estas “visiones” o
“profecías”, son de carácter negativo y catastrofista, como si
con ellas se quisiera advertir al Ser humano para que rectifique sus
pasos en el presente a fin de evitar esas traumáticas consecuencias de sus actos para el futuro. Este fenómeno no se sabe a qué
mecanismo obedece, aunque tal vez algún día la Ciencia encuentre
las claves para su explicación.
La facultad de Profecía, puede acontecer por razones
mediúmnicas y también anímicas, cuando en este caso la persona
no es un médium canalizador , sino un sujeto sensitivo , que capta por sí mismo la frecuencia psíquica que hay en los ambientes
físicos y no porque otro Ser ajeno a ella le transmita nada.
- Jose Luis Martín-
******************************
“He
aprendido que para ser profeta basta con ser pesimista”
-Elsa
Triolet(1896-1970),escritora francesa-
************************
|
martes, 28 de octubre de 2014
La postvida para un escéptico con inquietudes
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario