domingo, 25 de enero de 2015

Reuniones espíritas

EL CAMINO DE LA ILUMINACIÓN INTERIOR

En el laborioso aprendizaje de la vida, el trabajo de cada uno en la iluminación interior debe ser permanente y metódico. Los fenómenos despiertan al espíritu adormecido en la carne, pero no ofrecen las luces interiores, que solamente se consigue a costa del esfuerzo en el trabajo individual.
Las palabras de los guías y mentores del Más Allá nos enseñan, pero no puede constituir elementos definitivos de redención. Para tal cosa el Espiritismo, en su fase de Evangelio redivivo nos sirve de gran ayuda, gracias a sus enseñanzas caminamos con más claridad.
Numerosos filósofos han compendiado las tesis y conclusiones del Espiritismo en su aspecto filosófico, científico y religioso; todavía, para la iluminación de lo íntimo, sólo tenéis en el mundo el Evangelio del Señor, que ningún derrotero doctrinario podrá traspasar.
Además, el Espiritismo en sus valores cristianos no posee finalidad mayor que la de restaurar la verdad evangélica para los corazones desesperados e incrédulos del mundo.
Teorías y fenómenos inexplicable siempre hubo en el mundo. Los escritores y los científicos doctrinarios podrán movilizar sus conocimientos en la construcción de nuevos enunciados para las filosofías terrestres, pero la obra definitiva del Espiritismo es la edificación de la conciencia profunda en el Evangelio de Jesucristo.
El plano invisible podrá traeros los mensajes más conmovedores y convincentes de vuestros bien amados; podréis guardar los más elevados principios de creencia en vuestro mundo de impresión moral. Todavía, ese es el esfuerzo, la realización del mecanismo doctrinario en acción, junto a vuestra personalidad. Sólo el trabajo de auto-evangelización, sin embargo, es firme e imperecedero. Sólo el esfuerzo individual en el Evangelio de Jesús puede iluminar, engrandecer y redimir al espíritu, porque, después de la edificación con el ejemplo del Maestro, es que alcanzaremos la verdad que nos hará libres.
Todos los hombres creen en alguna religión o filosofía, sin embargo son muy pocos los que están iluminados. El que cree, apenas admite; pero el que se ilumina vibra y siente. El primero depende de los elementos externos, en los cuales coloca el objeto de su creencia; el segundo es libre de las influencias exteriores, porque hay bastante luz en su propia intimidad, de modo que puede vencer con coraje las pruebas a que fue sometido en el mundo.
Es por esa razón que los espiritistas sinceros deben comprender que no basta creer en el fenómeno o en la verdad de la comunicación con el Más Allá, para que nuestros sagrados deberes estén totalmente cumplidos, pues la obligación primordial es el esfuerzo, el amor al trabajo, la serenidad en las pruebas de la vida, el sacrificio de sí mismo, de modo de entender plenamente la ejemplificación de Jesucristo, buscando su divina luz para la ejecución de todos los trabajos que nos competen en el mundo.
Toda nuestra iluminación nace de nuestro sentir. El sabio desesperado del mundo debe volverse hacia Dios como el niño humilde, para cuidar de los legítimos valores del corazón, porque sólo por la reeducación sentimental, en los bastidores del esfuerzo propio, se podrá esperar la deseada reforma de las criaturas.
La existencia en la Tierra es un aprendizaje excelente y constante. No hay edades para el servicio de iluminación espiritual. desde niños y gracias a nuestros padres y educadores iniciamos el camino de nuestra iluminación interior, es por esa razón que los padres como educadores deben tomarse la tarea muy en serio de educar y esclarecer a los hijos que serán a su vez las luces del mañana.

Mercedes Cruz Reyes
Extraído del libro “El Consolador”

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                                           REUNIONES ESPÍRITAS

"Porque donde están dos o tres congregados en mi nombre, allí estoy yo en medio de ellos" ( San Mateo, 18:20). 
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Prefacio. Para estar reunidos en nombre de Jesús no basta hallarse juntos físicamente, sino que es preciso estarlo también en lo espiritual, por la comunión de intenciones y pensamientos dirigidos hacia el bien. Entonces sí se encuentra Jesús en medio de la reunión: Él, o los espíritus puros que lo representan. El Espiritismo nos permite comprender de qué manera pueden los espíritus hallarse entre nosotros. Están ahí con su cuerpo fluídico o espiritual, y con la apariencia que nos permitiría reconocerlos si se hicieran visibles. Cuanto más elevados se hallan en la jerarquía espírita, tanto mayor es su poder de irradiación. Así poseen el don de ubicuidad y pueden encontrarse en varios lugares simultáneamente. Basta, para ello, un rayo de su pensamiento.
Con las palabras citadas en el parágrafo anterior quiso Jesús mostrar el efecto de la unión y la fraternidad. No es la mayor o menor cantidad de personas la que le atrae, puesto que en lugar de dos o tres hubiera podido decir diez o veinte, sino el sentimiento de caridad mutua que a esas personas anima. Ahora bien, para esto es suficiente que haya dos. Pero si esas dos oran cada cual por su lado, aunque ambas se dirijan a Jesús, no habrá entre ellas comunión de pensamientos, sobre todo si no son movidas por un sentimiento de benevolencia recíproca. Y si se miran con malos ojos, con aborrecimiento, envidia o celos, entonces las corrientes fluídicas de sus pensamientos se rechazan en vez de unirse por un común impulso de simpatía, y en tal caso, no están reunidas en nombre de Jesús, el cual no es más que el pretexto de la reunión y no su verdadero motivo.....
Esto no implica, en modo alguno, que Él permanezca sordo a la voz de una sola persona. Si no dice que acudirá a cualquiera que le llame, es porque ante todo exige amor al prójimo, del cual podemos dar mayores pruebas cuando estamos en compañía de otros, que encontradonos solos, y también a causa de que todo sentimiento de tipo personal lo aleja. De ello se sigue que sí, en medio de una nutrida asamblea, sólo dos o tres personas se unen de corazón mediante el sentimiento de una auténtica caridad, en tanto el resto de los asistentes se aíslan y se concentran en pensamientos egoístas o de carácter mundano, Jesús estará con aquéllas y no con estos otros.
Así pues, no es la simultaneidad de los presentes en las palabras, en los cánticos o en los actos litúrgicos lo que constituye una reunión en nombre de Jesús, sino la comunión de pensamientos acordes con el espíritu de caridad personificado en Él.
Tal debe ser el carácter de las reuniones espíritas serias, de aquellas en que se desea con sinceridad el concurso de los buenos espíritus.

El Evangelio según el Espiritismo.

Comentario
Cuando personas afines se reúnen para el bien, no hay jefes, solo hermanos en sintonia de amor y  caridad, Cristo estará en medio de ellos 
Luz progreso y paz.  Marco Antuan

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“Educación de la  Mediúmnidad en la  Juventud" 

Fior Medina de Vilorio    

Desde el año 2011 los adeptos del espiritismo estamos conmemorando 150 años del lanzamiento del Libro de Los Médiums (un 15 de Enero de 1861), una de las obras del Codificador de la Doctrina Espírita, Profesor Hipólito De León Rivail (Allan Kardec), quien nos dejó como herencia espírita en este libro un tratado sobre la mediúmnidad, manual indispensable para todo estudioso del espiritismo y que debe ser de consulta diaria, pues nos explica como practicar la mediúmnidad conforme con las enseñanzas del Maestro Jesús, para que esa práctica sea segura para el médium y para los asistentes a la reunión.  Con motivo de esa conmemoración se han recordado, a través de distintas publicaciones, así como conferencias, los conceptos, opiniones y orientaciones que a través del tiempo distintos autores como Allan Kardec, León Denis, Edgard Armond, Ivonne Pereira, Manuel Philomeno de Miranda y otros han externado sobre el tema, por lo que es propicia la ocasión para en esta conferencia hacer un breve recuento, o recopilación de algunos aspectos relevantes sobre la Educación de la Mediúmnidad en la Juventud.
Vamos pues a iniciar definiendo las palabras educación, juventud, médium y mediúmnidad para mejor comprensión del tema. 

Educación: Del latín educaciones, acción y efecto de educar.  Educar, del latín educare: Desarrollar o perfeccionar las facultades y aptitudes del niño o adolescente para su perfecta formación adulta.  Nos dice Kardec que la educación bien entendida  es la clave del progreso moral (1)...Pestalozzi considerada la educación como el desenvolvimiento armonioso de todas las facultades del individuo…Entendemos por educación,  en sentido amplio, integral, el proceso continuo del perfeccionamiento de las facultades del Espíritu (2). En los términos espíritas, encontramos que la educación no es un proceso aislado.  Es una acción conjunta en que participan familia, educadores y medio social (3).

Juventud: Según  Wikipedia,  la juventud es la edad que se sitúa ente la infancia y la edad adulta.  De acuerdo a la Organización Mundial de la Salud  (OMS) la juventud comprende el rango de edad entre los 10 y 24 años, y abarca la adolescencia inicial (10 a 14 años),  la adolescencia media o tardía (15 a 19 años) y la juventud plena (20 a 24 años).  En la obra El Espiritismo de la A a Z, por Gerardo Campetti, encontramos las siguientes definiciones de Adolescencia:  a) …periodo de desenvolvimiento orgánico y mental del espíritu encarnado que sigue al de la infancia y a partir del cual, ese “Espíritu recupera su naturaleza que le es propia y se muestra como era” en la encarnación precedente (ver Libro de los Espíritus, Pregunta 385)….b)  El mundo mental del joven no está prisionero a las fronteras del recinto familiar como se encontraba en la fase infantil…la fase de la adolescencia es mucho más peligrosa que la infantil….la etapa de la adolescencia precisa asimismo no de centinelas vigilando y amparando sus pasos, sino de mucho apoyo y orientación de los padres en el sentido de esclarecimiento espiritual y dialogo evangelizado. 

Médium.  En el párrafo 159, del Libro de Los Médiums, Kardec esclarece que “toda persona que siente en cualquier grado la influencia de los Espíritus es por esto mismo médium.”  El médium es el agente indispensable con cuyo auxilio se producen las manifestaciones del mundo invisible…  Es el intermediario obligado entre los dos mundos… (4) 
Según  nos explica Kardec  esa relación entre los espíritus y los médiums se establece por medio del periespiritu;  la facilidad que existe en estas relaciones depende del grado de afinidad que haya entre los dos fluidos; los hay que se asimilan fácilmente y otros que se repelen… por tanto no basta ser médium para comunicarse indistintamente con todos los Espíritus, hay médiums que no pueden comunicarse con determinados Espíritus y otros que solo lo consiguen por una transmisión de pensamiento sin ninguna manifestación en exterior. (5)

Mediúmnidad: Es una facultad existente en los hombres, por medio de la cual los Espíritus desencarnados pueden comunicarse con los Espíritus encarnados. (6)

Esclarece  Allan Kardec  en el Evangelio Según El Espiritismo “que la mediúmnidad se vincula a una disposición orgánica de la cual todo hombre puede estar dotado, como la de ver, oír,  hablar….La mediúmnidad es dada sin distinción, a fin de que los Espíritus puedan llevar la luz a todas partes, a todas las clases de la sociedad, así entre los pobres como entre los ricos; a los sabios para fortalecerlos en el bien y a los viciosos para corregirlos…La mediúmnidad no implica necesariamente intercambio habitual con los Espíritus superiores, es sencillamente una aptitud para servir de instrumento más o menos flexible a los Espíritus en general. (7)  Es por eso que un médium aplicado, de conducta elevada puede servir de intermediario de los espíritus sufrientes, o menos evolucionado, cuando fuera necesario.

Nos aclara también Kardec que “la facultad medianímica es independiente de las cualidades morales del médium, y se la encuentra desarrollada tanto en los más indignos como en los más dignos.  No sucede lo mismo con la preferencia que dan los buenos espíritus al médium….Es un don de Dios, como todas las  otras facultades,   pueden emplearse en bien y en mal, y de la cual puede abusarse.  Tiene por objeto ponernos en comunicación directa con las almas de los que han vivido, a fin de recibir sus enseñanzas y de iniciarnos en la vida futura…El que de ella se sirve, de un modo útil, para su adelanto y el de sus semejantes, cumple una verdadera misión, por la que recibirá recompensa.  El que abusa de ella y la emplea en cosas fútiles o para su interés material, la aleja de su fin providencial, y sufre tarde o temprano la pena, como aquel que emplea mal cualquier otra facultad.” (8)                                               

El fenómeno mediúmnico a través de los tiempos.                          

La mediúmnidad ha estado presente en todos los tiempos, pues desde que el hombre existe hay mediúmnidad, por tanto no fue creada por el espiritismo.  Existen muchas corrientes del cristianismo que tildan al espiritismo y a la mediúmnidad como algo contrario a las enseñanzas del Maestro Jesús. 

Sin embargo, la ley Mosaica inscripta en Levítico y Deuteronomio (9), que prohíbe la comunicación con los espíritus, es la primera prueba de la comunicabilidad de los espíritus, porque no es necesario prohibir algo que no existe.  Así que desde el mismo momento en el que Moisés prohibió la comunicación con los espíritus, es porque esa comunicación existía y existe.
En el Antiguo y Nuevo Testamento encontramos pasajes que podemos considerar como tratados de mediúmnidad.  Uno de ellos es la Primera Epístola de Pablo  a los Corintios en los Capítulos 12 vers del 7 al 11, donde el Apóstol Pablo nos habla de los dones del espíritu.  Otro  tratado sobre mediúmnidad que circuló en tiempos apostólicos fue el libro El Pastor, que se le atribuye a Hermas. Se dice que Hermas era discípulo de los Apóstoles y es el mismo que Pablo manda a saludar de su parte en la epístola a los Romanos (XVI, 14). Hermas indica en el libro El Pastor, los medios para distinguir  los buenos de los malos espíritus. 

Las siguientes líneas, escritas ya hace dos mil años parecería se describe una sesión mediúmnica….un médium parlante en plena ejecución de su facultad: (10)

El Espíritu que viene de parte de Dios es pacífico y humilde; se aleja de toda malicia y de todo vano deseo de este mundo y está  por encima de todos los hombres. No responde a todos los que lo interrogan ni a las personas en particular, porque el espíritu que viene de Dios no habla al hombre cuando el hombre quiere, más cuando Dios lo permite.  Cuando, pues, un hombre que tiene un espíritu de Dios viene a la asamblea de los fieles, desde que se hace la oración el espíritu toma lugar en ese hombre que habla en la asamblea como Dios  quiere (Es el Médium Parlante)…. Se reconoce por el contrario el espíritu terrestre, frívolo, sin sabiduría y sin fuerza en que se agita, se levanta y toma el primer lugar…Un profeta de Dios no procede así.”

En la biblia también encontramos otro tratado de mediúmnidad, el cual nos relata ampliamente Cairbar Schutel en su obra Parábolas de Jesús (11)…Se cumplió el día de Pentecostés –todos estaban reunidos, cuando de repente, vino del Cielo un ruido…y llenó toda la casa en donde se hallaban.  Se les aparecieron como lenguas de fuego, que se repartían y se posaban sobre cada uno de ellos.  Y todos quedaron llenos del Espíritu Santo y comenzaron a hablar lenguas extrañas, según el Espíritu Santo les movía a expresarse…Al oír el ruido, la multitud se reunió y quedo estupefacta, porque cada uno los oía hablar en su propia lengua…. ¿No son galileos todos los que están hablando? Pues, ¿Cómo los oímos cada uno en nuestra propia lengua?....
…El don de las lenguas, el don de curar, el don de las maravillas, el don de la ciencia, todos los dones habían sido concedidos a los continuadores de la Misión de Jesús, ellos eran los intermediarios (médiums) de los Espíritus santificados, para que la Doctrina fuese transmitida a todos….….Como era una asamblea pública compuesta por hombres de diferentes condiciones y moralidad…unos atribuían los fenómenos a la embriaguez de los Apóstoles, otros no tomaban en serio los hechos y se burlaban…
Entonces el Apóstol Pablo se levantó y esclareció:  “Estos hombres no están borrachos, pero se está cumpliendo lo que fue dicho por Joel:  En los últimos días, dice el Señor, derramaré mi Espíritu sobre todos los hombres, vuestros hijos y vuestras hijas profetizaran, vuestros jóvenes tendrán visiones, y vuestros ancianos sueños.

En la opinión de Divaldo Pereira Franco esta profecía de Joel, que encontramos en Los Hechos de Los Apóstoles II, es uno de los más bellos argumentos de anuncio de la mediúmnidad generalizada, eliminando los viejos conceptos de don, privilegio, concesión especial, y conduciéndola a la realidad de conquista intelecto-moral del Espíritu en su proceso de evolución. (12)
El material histórico sobre la mediúmnidad es muy amplio, pero no podemos pasar por alto la mención de algunos espíritus que durante todas las épocas han hecho grandes aportes de sus facultades mediúmnicas, muchos de ellos desde su juventud,  como lo afirman los textos que sobre mediúmnidad encontramos en la biblia en todas sus formas y grados (13)
a) Moisés es vidente y auditivo. Es médium escribiente cuando escribe las tablas de la Ley
b) Samuel, profeta desde la infancia era despertado por voces que le llaman durante las noches y le comunican las cosas futuras
c)  Esdras reconstituye la biblia entera que se había perdido...con el auxilio denominado “La Voz”
d) Saúl fue un médium de psicofonía. Fue primeramente un médium del Señor, pero a consecuencias de faltas graves y de una vida de desorden perdió sus facultades, o mejor dicho se convirtió en instrumento de espíritus inferiores
e) El Maestro Jesús, El Médium de Dios, como lo califica Allan Kardec en Génesis Capitulo 15, ítem 2, (Médium parlante, psicógrafo, de curación, facultad de aporte, facultad de discernimiento, entre otras)
f)   Juana de arco fue quemada viva por no haber querido renegar de sus apariciones y de las voces que había oído
g) En el siglo XVIII se destaca el médium Emmanuel Swedenborg
h) En el siglo XIX reencarnan Médiums con la misión de comprobar la realidad espiritual.  Entre ellos citamos, Andrew Jackson Davis, (notable médium llamado el Padre del Espiritismo Moderno, el profeta de la nueva revelación, por haber anunciado el advenimiento del Espiritismo),  Eusapia Paladino, Amalia Domingo Soler, Florence Cook, etc.  Las hermanas Catalina y Margaret Fox, en los orígenes del espiritualismo moderno, son las primeramente llamadas a recibir las manifestaciones y a recoger el mensaje de la inmortalidad.(14)

También debemos reconocer la amplia labor de divulgación de la Doctrina Espirita y de La Mediúmnidad realizada por Francisco Cándido Xavier, Chico, quien dedicó 75 años de su vida a un intenso trabajo mediúmnico; así como resaltar el trabajo de propagación del Espiritismo que están realizando algunos médiums encarnados de esta época, como Divaldo Pereira Franco, Raúl Teixeira, Simone Prívate Goldavish y Carlos Campetti, entre otros.

Eclosión de la mediúmnidad
La mediúmnidad es una facultad natural, y eclosiona o surge en el momento  apropiado, según haya sido definida en el planeamiento reencarnatorio del individuo, pues es un “compromiso” que el Espíritu asumió antes de reencarnar en interés de acelerar su progreso espiritual (15).   

Por las faltas que cometimos en vidas pasadas, antes de reencarnar rogamos una oportunidad, es entonces cuando surge en su tiempo la mediúmnidad como expiación, para que utilicemos esa herramienta de trabajo para resarcir las equivocaciones y errores, pues es a través del trabajo mediúmnico disciplinado (con la evangelización, o reforma moral y el estudio) que podemos ser medianeros de la espiritualidad superior para llevar el consuelo a nuestros hermanos necesitados, encarnados y desencarnados.

En el Curso de Estudio y Educación de La Mediúmnidad de la FEB (16) aprendimos que la eclosión mediúmnica pude ocurrir de forma espontánea o de prueba.  Cuando es espontánea no genera al médium mayores trastornos, sean físicos, sean emocionales, y es el caso de aquellas personas que desde pequeños ven y conversan con los espíritus de manera natural.  Recordamos la lectura del libro Recuerdos de La Mediúmnidad, de Ivonne Pereira, donde ella expone “que existen mediumnidades que se revelan desde la cuna y estas son las más seguras, las más positivas, fruto de largas etapas reencarnatorios durante las cuales sus poseedores han ejercido actividades destacables, desarrollando de esta forma fuerzas del periespiritu, sede de la mediúmnidad….(17)
Sin embargo cuando surge como prueba el médium presenta diferentes desórdenes emocionales y jamás es idéntica en dos individuos.  Entre las perturbaciones que pueden surgir están:
A)    Reacciones emocionales insólitas
B) Aparente sensación de enfermedad 
C)  Escalofríos y malestar, por la aproximación de ciertas entidades, y por nuestra propia sensibilidad
D)  Irritaciones extrañas, como arranques de agresividad, violencia, sin saber por qué.
E) Enfermedades que surgen y desaparecen sin explicaciones médicas claras

En la opinión de Edgar Armond  (18) estas perturbaciones pueden tener dos causas: una intrínseca que depende de las propias imperfecciones del médium y que se reflejan en su aura individual con tonalidades inferiores y vibraciones desordenadas, y otra extrínseca por interferencia, o acción fluídica  de Espíritus familiares u obsesores.  Es decir, por la afinidad fluídica existente entre encarnado y desencarnado, si el espíritu está desarmonizado, ese vibrar se transfiere de forma automática para el médium, quien pasa a sentir esas mismas sensaciones.  

La finalidad de estas perturbaciones es para llamar la atención del médium, de manera que inicie la búsqueda o procedencia de tales males a través de la asistencia a un Centro Espirita bien orientado donde encontrará el consuelo y las respuestas a sus inquietudes.
La mediúmnidad surge en el ser humano por etapas sucesivas.  El primer ciclo es en la infancia, y solo se debe intervenir en ese proceso mediúmnico con oraciones y pases para suavizar las excitaciones naturales del niño.  En la adolescencia, a partir de los doce o trece años se inicia el segundo ciclo, cuando ya el cuerpo maduró lo suficiente para que las manifestaciones mediúmnicas sean más intensas y positivas.  En este periodo es tiempo de orientarlo con informaciones precisas sobre el problema mediúmnico….El pase, la oración y las reuniones de estudio doctrinario son los medios de auxiliar el proceso sin forzarla, dándole la orientación necesaria. (16)

…El tercer ciclo ocurre generalmente al pasar de la adolescencia a la juventud, entre los dieciocho y los veinticinco años.  En esa fase, es tiempo de los estudios serios del Espiritismo y de la Mediúmnidad, así como la practica mediúmnica libre, en los centros y grupos espiritas bien orientados.  Cabe señalar que cuando los médiums nacen en un ambiente espirita, esto le permite que desde temprano se cultive la facultad a la luz del evangelio y bajo las directrices del espiritismo codificado por Kardec, ya que estos jóvenes han agotado los cursos básicos que para estos fines ofrecen los Centros Espiritas equilibrados.
Sin embargo, cuando el médium llega a un Centro Espirita, siendo adolescente,  con perturbaciones espirituales, como ya explicamos anteriormente, y con el desconocimiento de lo que es la doctrina espírita, lo primero es orientarlo para un tratamiento espiritual a través de pases, agua fluidificada, frecuentar las reuniones públicas evangélico-doctrinarias, la perseverancia en el bien, el trabajo noble, la oración y la vigilancia,  su  participación en  reuniones de estudios evangélicos, y que inicie la práctica del evangelio en el hogar, son algunas de las pautas que le proporcionarán los recursos para un gradual equilibrio..

Pues, como nos dice Emmanuel  en su obra Mensaje a Los Médiums:  “Los médiums, en su generalidad, no  son misioneros, en la acepción del término; son almas que fracasaron rotundamente, que contrariaron sobremanera el curso de las leyes divinas y que ahora intentan rescatar, con el peso de serios compromisos e ilimitadas responsabilidades, el pasado oscuro y delictuoso…Casi siempre son Espíritus que cayeron de las cumbres sociales por el abuso del poder, de la autoridad, de la fortuna y de la inteligencia y que regresan al orbe terráqueo para sacrificarse a favor del gran numero de almas que se desviaron de las sendas luminosas de la fe….son almas arrepentidas que procuran recuperar todas las felicidades que perdieron reorganizando, con sacrificios, todo cuanto destruyeron en sus instantes de criminales arbitrariedades y de condenable insania.”

Conforme destaca León Denis en su Obra “En Lo Invisible”, (19) en este primer periodo de desarrollo el médium está especialmente asistido por espíritus de orden inferior, cuyos fluidos impregnados todavía de materia, se adaptan mejor a los suyos y son apropiados a ese trabajo de bosquejo…En ese tiempo de prueba y de estudio el médium debe mantenerse prevenido y evitar preguntas ociosas o interesadas, chanzas y todo aquello que tenga un carácter frívolo, que atraiga los espíritus ligeros.  Sin embargo, el médium no debe desanimarse….pues siempre tenemos espíritus buenos que velan por nosotros y que ponen a prueba nuestra perseverancia…

…Por tanto el médium no debe buscar la mediúmnidad como objeto de pura diversión o de simple curiosidad, sino ver en la mediúmnidad una herramienta de trabajo que debe utilizarse con respeto para el bien de nuestros semejantes, encarnados y desencarnados…  Al terminar la primera fase del desarrollo de la facultad el médium debe asegurarse de tener la protección de un espíritu bueno, elevado, que le guie, le inspire y le preserve de todo peligro.  Para lograr este objetivo el médium debe estar en vigilia y no debe apartarse de la oración.

Nos sigue orientando León Denis que  la mediúmnidad es una planta delicada que para florecer necesita atentas precauciones y cuidados.  Necesita método, paciencia, altas aspiraciones, y sentimientos  elevados.  De ahí que en la antigüedad, los jóvenes en que se revelaban aptitudes especiales eran retirados del mundo, puestos fuera del alcance de toda influencia degradante, en lugares consagrados al culto, rodeados de todo cuando podía elevar su pensamiento y su corazón, desarrollando en ellos el sentido de lo bello.  Tales eran las vírgenes vestales, las sacerdotisas druidas, las sibilas, etc.

 Educación de la mediúmnidad

El Curso de Estudio y Educación de La Mediúmnidad de la FEB, (20), esclarece que la educación o desarrollo de la mediúmnidad es el conjunto de acciones educativas dirigidas para el ejercicio correcto de la mediúmnidad, y deben desarrollarse en un Centro Espirita que funciona como escuela de formación espiritual y moral.  Para la educación de su mediúmnidad el médium cuenta con el auxilio de los benefactores espirituales, bajo la orientación de su Espíritu protector, mentor espiritual o ángel de la guarda.  Un Centro Espirita bien orientado dispone de un equipo de encarnados que están a cargo de la tarea de formación y educación del médium.

La educación y desarrollo de la mediúmnidad exigen trabajo, voluntad, responsabilidad, dedicación, entrenamiento, sacrificio y esfuerzo de nuestra parte. Así también el médium debe esforzarse por ser disciplinado, ordenado, humilde y discreto en todas las actividades de la vida tanto familiar, como profesional y social, para que así se vaya preparando para ser un instrumento útil a los buenos espíritus.

Así como todas las profesiones y oficios requieren estudio y perfeccionamiento,  el buen médium tiene la obligación de disciplinarse, de educarse moral e intelectualmente para que pueda afinar, y por ende ser un instrumento idóneo que pueda ganarse la simpatía de los buenos espíritus.  Tal y como nos propone el Maestro Kardec es imprescindible el estudio doctrinario de las obras básicas que componen la Codificación Espirita, así como la moralización o reforma intima en base al evangelio de Jesús, que nos propone el Espiritismo, ya que ambos constituyen los pilares básicos para una mediúmnidad bien dirigida, y poder alcanzar la Mediúmnidad con Jesús, que es la que se practica en el Espiritismo.  Las lecturas edificantes le proporcionarán también un enriquecimiento intelectual que le permitirá ser un intérprete seguro de los mensajes de los espíritus.

Para lograr una buena educación mediúmnica, el médium debe también cultivar la oración y la meditación, que serán su refugio en los momentos de dificultad, así como una puerta abierta a la sintonía con los guías o mentores espirituales que velan por El, y lo auxilian para alejarle de las influencias negativas. 

Al ser la educación de la mediúmnidad una tarea delicada, muchos la abandonan, perdiendo la oportunidad de progreso y auto-iluminación para los que fueron llamados.  En esas circunstancias se exponen a los peligros que una mediúmnidad mal dirigida trae consigo, quedando al capricho de entidades que se complacen en arrastrarles a situaciones que le comprometerán seriamente el futuro.  La facultad mediúmnica debe ser dirigida y educada según las pautas y enseñanzas que Allan Kardec nos dejó en el Libro de los Médiums, Capitulo 18, donde expone todos los beneficios y los peligros que acompañan el ejercicio de la mediúmnidad, explicándonos como librarnos de esos peligros para no caer en las redes de espíritus que quieran engañarnos; ya que en cada uno de nosotros existen rudimentos de mediúmnidad, facultad que puede desenvolverse mediante el ejercicio. 

Basada en la propia experiencia que vivió siendo niña Ivonne Pereira  afirma que en algunos esta facultad aparece desde la infancia y con los años alcanza un alto grado de perfección.  Cuando es así, es el resultado de adquisiciones anteriores de vidas pasadas, fruto de trabajos llevados a cabo en la tierra o en el espacio…. la mediúmnidad es una facultad espontánea que no debe ser provocada sino aceptada cuando se presente naturalmente, sin insistir en su desarrollo.  Al respecto agrega también  que la facultad mediúmnica no alcanza el nivel necesario, la posibilidad de desarrollo normal en un año ni en diez, sino a través de etapas reencarnatorios….las enseñanzas contenidas en los códigos espiritas, la advertencia de los espíritus elevados, y la práctica del espiritismo demuestran que ninguna persona debe provocar a la fuerza el desarrollo de sus facultades mediúmnicas, porque sería contraproducente, provocando nuevos fenómenos psíquicos y no propiamente espiritas, como la auto sugestión, el animismo o el personalismo (17).

La educación de la  mediúmnidad se realiza lentamente, con estudio tranquilo, silencioso, apartado de los placeres mundanos y de las pasiones.  Podemos estar seguros de que después de un periodo de preparación y de espera el médium recogerá los frutos de su perseverancia y de sus esfuerzos.  Sin embargo, es sabido por todos que las exigencias sociales del Siglo XXI no siempre permiten al médium, y en especial a los jóvenes, consagrarse como convendría al cultivo de sus facultades.  Las necesidades de la vida de familia distraen su atención, aparte de que el contacto de una sociedad más o menos frívola o corrompida pone trabas a sus aspiraciones.

De ahí que es necesario recomendar a los jóvenes que deseen educar su mediúmnidad, las palabras del Codificador Allan Kardec en el Capitulo 17, párrafo 10,  del Evangelio según el Espiritismo que nos dice…vivid con los hombres de vuestra época, como deben vivir los hombres y sacrificaos a las necesidades, aun a las frivolidades del día…sed alegres, sed felices, pero con la alegría que da una buena conciencia…la virtud no consiste…en rechazar los placeres que vuestras condiciones humanas permiten., basta dedicar todos los actos de vuestra existencia al Creador que dio esta vida…. En resumen invita a los jóvenes a vivir en el mundo sin dejarse envolver por el mundo.

Conclusión

Basados en todas las ideas recopiladas y expuestas en esta conferencia en torno a la mediúmnidad, su eclosión y su educación, recomendamos a los jóvenes no huir, no rechazar el ejercicio de la misma, pues es la misericordia de Dios que nos permite, a través de la mediúmnidad, poner en práctica el amor a través del sacrificio.  Por tanto, los jóvenes que se interesen en su educación mediúmnica deben participar de las Reuniones de la Juventud Espirita que se llevan a cabo en los Centros Espiritas bien orientados, ya que allí se ofrece a los jóvenes condiciones adecuadas de estudio y aprendizaje del Espiritismo, lo que les servirá para familiarizarlos con las actividades del Centro y a la vez prepararlos para los encargos que deberán asumir en el futuro. (21)
Es muy importante que  los Centros Espiritas se dediquen, entre sus actividades,  a la orientación de la infancia y la juventud, ya que como nos dice Francisco Thiensen la infancia y la juventud son el campo fértil a labrar preparando la sociedad del futuro, pues el objetivo principal de los cursos de orientación es la moralización espirita,  formando hombres y mujeres dignos desde la infancia (22).

En estos cursos de educación de la mediúmnidad el joven aprenderá que la mediúmnidad se presenta como una oportunidad de servicio edificante que proporciona a su portador los medios de iluminarse, de crecer moral e intelectualmente, de ampliar los dones espirituales y sobre todo de prepararlo para enfrentar la conciencia después de la desencarnación (23).

Así también a través de estos cursos los jóvenes se van iniciando en las tareas propias de un Centro Espirita, y se tornan instrumentos idóneos para cooperar en la evangelización de la infancia, contribuir en las actividades espirituales de la Casa Espirita por la oración y concentración como médium de apoyo, participando en la aplicación de pases etc.; tareas que en la Casa Espirita le permitirán al joven agudizar su percepción espiritual.
Para esta importante labor de educación a los jóvenes se necesitan pues adeptos que se concienticen para el estudio de la Doctrina Espírita porque así comprenden que no se pueden ocupar de una actividad para la cual no se encuentran preparados, ya que es difícil sensibilizar la mente infanto-juvenil y transmitirle conocimientos doctrinarios si el evangelizador no estuviera tocado por el contenido que pretende transmitir, pues esta tarea exige de los trabajadores de la evangelización un mayor conocimiento de las necesidades e intereses de este grupo.(22)  La mediúmnidad necesita orientación y orientadores competentes al igual que los discípulos necesitan maestros.

Tal y como recomienda el Curso de Estudio y Educación de la Mediúmnidad de la FEB, la mejor directriz evangélica que podemos dar a nuestros jóvenes para la educación de su mediúmnidad,  están contenidas en la epístola de Pablo a los Romanos Capitulo 12, (Deberes Cristianos), vers 2 a 18 y que Chico Xavier psicografió en su libro Opinión Espirita, Lectura No. 26.

Al finalizar queremos recordar a los padres la orientación de los Espíritus en la pregunta 582, del Libro de Los Espíritus, cuando nos dicen que “Dios ha puesto al hijo bajo la tutela de los padres para que éstos le guíen en el camino del bien”.  En tal sentido la FEB exhorta a los padres a promover un ambiente doméstico afectuoso, coherente y evangelizador, a fin de favorecer el desenvolvimiento moral de los hijos y orientarlos por el camino del bien. Concluimos este trabajo con el vibrar de las palabras del Espíritu Joanna de Angelis,  psicografiados por Divaldo Pereira en el libro Momentos de Mediúmnidad, para que las mismas queden grabadas en nuestro ambiente periespiritual  y podamos transmitirlas a todos aquellos jóvenes que deseen iniciarse en la mediúmnidad:
“No te apresures a desarrollar tus facultades mediúmnicas.  Perfecciona primero tus valores morales, templándote contra las pasiones inferiores de modo que puedas superarte. …

*Procura preservar la vida interior y evita ser agresivo, ni siquiera con el pensamiento, a fin de ofrecer a los espíritus un campo mental tranquilo….

*Cultiva la paciencia y somete la presunción, así te armarás de conciencia moral para lograr la sintonía correcta con los desencarnados, sintonía que los benefactores espirituales encargados de tu programa mediúmnico establecerán para tu tarea de redención….

Fior Medina de Vilorio    
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