UN VERDADERO LUJO
Hay un tiempo en la vida de cada persona, para regalarse algo en verdad importante, para ser merecedores de un verdadero lujo, para declararse una persona de éxito y ¿que es el éxito? sino la cima del ideal personal, si está pensando en dinero, posición social, fama o poder, tal vez sea por eso que mucha gente no lo consigue.
Porque un verdadero lujo es poder llamar a las cosas por su nombre, comenzar a decir verdades, saber hablar de sentimientos y dejar de eludir la conciencia.
Un verdadero lujo es aceptarnos, como somos y como podemos llegar a ser, primeramente, para luego aceptar a los demás, sin artificios, sin adornos y sin lástimas.
Un verdadero lujo es despreciar las convenientes mentiras, la gente deshonesta, los amores no correspondidos, la gente mal agradecida y las malas compañías.
Un verdadero lujo es trabajar para cubrir nuestras necesidades y no para aumentarlas, saborear el pan ganado y dormir cansados en una cama que es un oasis y una fabrica de sueños.
Un verdadero lujo es acercarse a los que amamos, sin regatear muestras de cariño, sin interés alguno y por darle rienda suelta a nuestro manantial de afecto.
Un verdadero lujo es alejarse de quien nos daña, sin que ningún interés nos detenga, porque la dignidad no es negociable, quien daña no respeta y sin respeto no puede haber afecto.
Un verdadero lujo es disponer de tiempo para disfrutar lo que se tiene, sin posponer al futuro la felicidad, sin aferrarse a un pasado que ya no existe más y que impida lo que ha de llegar.
Un verdadero lujo es nuestro derecho a pensar y nuestra libertad de sentir, recuperar la espontaneidad, aprender a recibir y nunca perder la capacidad de dar y compartir.
Hay un punto en la vida de la gente, en que se puede dar, si quiere y se quiere a si mismo, un verdadero lujo, que no cuesta y que por el contrario, le dará mucho a ganar, de menos... su natural tranquilidad.
Lucia Toranzo Noriega
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¿
La mediumnidad se puede definir cómo una
anomalía psíquica ?.-
Hay
quien cree que los médiums son en todos los casos enfermos
mentales con cuadros
de histeria , paranoias o esquizofrenia, o
que son víctimas de toda clase de alucinaciones.
En efecto,
se pueden dar casos de que estas enfermedades mentales sean la
causa de una aparente y falsa mediumnidad, pudiendo llevar a
la confusión para distinguir entre la auténtica
mediumnidad y estos casos patológicos. La cuestión básica a
despejar sería:
¿ Son personalidades múltiples de la misma persona
las que aparecen en diversos momentos, o realmente muchas veces se
trata de múltiples entidades diferentes e independientes del médium,
como tantas veces se ha demostrado y se viene demostrando?.
Como se ha
señalado ya, la mediumnidad es solamente una facultad orgánica,
cerebral, como lo puede ser la inteligencia o la memoria, nada
anormal, pues es muy común en la mayoría de las personas que la
poseen aun sin saberlo, en muy diversas modalidades y grados de
desarrollo, aunque los conocidos como médiums son quienes la
evidencian porque la poseen en mayor grado.
La
mediumnidad no supone ni conlleva la enfermedad. Lo que puede hacer
enfermar al médium no es la presencia de la facultad, sino sus
deudas ante las Leyes Divinas (su Karma), desde esta o desde alguna
anterior encarnación.
Al encontrarse el médium actuando entre dos planos de la existencia,
puede experimentar determinados estados que se confunden con
patologías o con enfermedades. Manifestada en el área intelectual,
se pueden presentar estados de aparente alucinación auditiva,
visual, ansiedad, recelo, claustrofobia, miedos nocturnos
injustificables
o intranquilidades y malestares. En el área física, puede originar
ruidos y golpes inesperados, sensaciones de presencias gratas o
ingratas, cambios de objetos de lugar, etc. En el área onírica,
esto es, durante los estados de sueño, se pueden dar fenómenos de
encuentros espirituales, desdoblamientos y pesadillas. No significa
esto que esas manifestaciones sean siempre mediumnidad, pero sí
suponen que la mediumnidad se puede revelar a través de estos
fenómenos.
La mediumnidad,
sobre todo durante su desarrollo, puede llevar al indivíduo hasta
estados de empatía. Tan pronto puede sentir alegría y felicidad,
como igualmente se sumerge en estados depresivos; a veces tienen la
sensación de que algo bueno les está ocurriendo, sonrien, se
emocionan, o tienen la sensación de que una gran tragedia les
acecha. Todo esto son sensaciones de buenas o de malas presencias
que caracterizan la mediumnidad inspirativa y la de incorporación.
En los casos
reales y auténticos de mediumnidad profunda, cuando salen del trance
mediúmnico, vuelven a la más absoluta normalidad, mientras que
los casos patológicos mantienen sus síntomas antes, durante
y después de estas manifestaciones.
- - Jose Luis Martín-
Toda persona que siente, en mayor o menor grado, la influencia
de los
espíritus,es un médium. Siendo esta facultad inherente al
hombre,
no constituye por tanto un privilegio
exclusivo.
De allí
que haya pocos que no posean
algunos
rudimentos de ella. Es
posible afirmar entonces que todos los seres
humanos-en mayor o
menor medida-son mediums”.
- - Allán
Kardec -
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FEMINIDAD
El concepto de adulterio ha quedado grabado en
el hombre como símbolo de una feminidad desgastada
y perversa, sin pararse a valorar la profundidad de la
enseñanza.
El verbo adulterar no es ni femenino ni masculino,
es apenas la razón espiritual que nos enseña el
valor del compromiso.
el ser en sus inicios reflejaba el instinto animal
para poder sobrevivir en un medio hostil y difícil, más
no pasó demasiado tiempo sin que adulterara la necesidad
vital por una necesidad hegemónica.
Los tentáculos
del orgullo le apartaron del principio espiritual para el
que había nacido, adulterando la estructura fraterna por
el mito de la sangre. La sangre humana desde entonces
comenzó a derramarse en una orgía deshumanizada de
honra y dolor.
Nuevamente el hombre volvió a adulterar la palabra
para convertir la honra en un yugo tras el cual se escondían
deseos de perversión, un yugo que esclavizó
tras sus rejas, la feminidad conciencial para reducir a
la saga humana en el estrecho círculo del machismo. Así, en un mundo donde la feminidad espiritual se
apartó, solo pudo sobrevivir el machismo y el macho
irracional. La irracionalidad tomó posesión de hombres
y mujeres, porque el “macho” es una acepción que no
está únicamente circunscrita al “hombre”.
Más allá, en
la noche de los tiempos, la propia mujer abandonó la
esencia femenina del espíritu, para convertirse en deudora
del paradigma que ha de desarrollar la sensibilidad
renovadora.
No se adultera el concepto, se adultera la misión;
y la misión del espíritu es recorrer los diferentes estados
por los que ha de adquirir la experiencia que le reconozca
como poseedor del conocimiento. cada vez que
la experiencia le ha conducido hacia derroteros de “debilidad”
física, los espíritus humanos han negado el principio
de igualdad y coherencia embriagándose con
reflejos de poder y prepotencia.
“La mujer” en la trayectoria humana, todavía está
discriminada porque la realidad psicológica que ella representa, no ha sido integrada en la conciencia “del
macho”.
Someter lo que es considerado débil, ha sido
desde el inicio racional la conducta adoptada por todos.
la mujer física sigue escondiendo tras los pliegues de
su espíritu, el macho que lleva dentro, porque no acepta
el sometimiento impositivo de una debilidad física que
ha condenado durante milenios al sexo débil.
La frustración de no ser el más fuerte, ha sido la
verdadera causante de que la feminidad no haya sido
aceptada dentro de los cánones de ninguna sociedad civilizada.
Vuelve la necesidad de dominar una y otra vez
como talón de Aquiles del espíritu humano, rechazando
la “otra cara” que reivindica constantemente ser reconocida
para poder realizar la obra magna de dios y ser
completado “el hombre” en todo su esplendor, como
ciudadano en el concierto universal.
Mientras la conciencia femenina siga apartándose
de la experiencia cotidiana, no tendrá nacimiento el auténtico
ser integral. ambos necesitan estar unidos en la
armonía psicológica para que pueda producirse el despertar
humano, no en la conciencia, sino en la supraconciencia
imprescindible para el avance en el mundo de
regeneración.
La conciencia femenina duerme el sueño de la
fuga, esperando siempre que el ardid masculino la libere
de la prisión en la que se cree vivir. Fue necesario al
principio inteligente dividirse para poder enfrentar la
multiplicación de los objetivos propuestos, asegurando
la procreación que sustentaría el programa divino.
Macho y hembra en la etapa animal, hombre y mujer en
la logística humana, espíritu asexual en la escuela angélica.
los roles desempeñados en la etapa animal, fueron
aceptados sin rebeldía por las distintas especies que
poblaron el orbe terrestre. al macho se le dio la fuerza
con la que protegería a sus cachorros y su estirpe. la
hembra repartiría el alimento que permitiría el desarrollo
de la propia fauna. la debilidad no era cuestión de sexo,
si no de miedo ante los adversarios y la subsistencia.
La autora nos invita a descender a nuestro yo profundo para encontrarnos cara a cara con nuestra dualidad
espiritual, aquello que somos en esencia: espíritu eterno, alternando en múltiples encarnaciones los papeles
de hombre y mujer. La pregunta es dolorosa, ¿por qué nos rebajamos a nosotros mismos y aceptamos la sumisión
de forma mayoritaria en nuestra etapa femenina y caemos repetidamente en el abuso de poder en la
forma masculina, posponiendo indefinidamente la conquista del ser integral?
Lo masculino, lo femenino, propio medio. el vehículo del instinto y de la sensación
permitió la unión de ambos sexos equilibrando el Ying
y el Yang del principio inteligente. Cargado de experiencias, llegó el momento del
despertar de la conciencia a través del raciocinio, mediante
el cual, el ser se enfrentaría al reto del bien y del
mal. La ley del más fuerte se impuso con nuevas características
humanas. El poder y el dominio iniciaron un
recorrido castrante por la senda del sexo. Los espíritus
en condiciones de mujer fueron sometidos por leyes absurdas
y fuerza animal. Los espíritus machos se impusieron
sobre el principio de respeto que rige el universo. La no aceptación del “sexo débil” por la mayoría
de los espíritus, bloquearon la mente de forma automática en la propuesta femenina como forma irrecusable
en la formación de la personalidad holística. La lucha
de los sexos es la exteriorización de la lucha psicológica,
por parte de ambas coyunturas en aceptar la propuesta
divina.
Gradualmente la experiencia femenina en el ser
ha sido secuestrada por el subconsciente y archivada sin
llegar a ser analizada.
La mujer aceptó el papel de sumisión, únicamente
por la fuerza del machismo, abrigando en su interior la
convicción de que era lo justo. por eso, cuando los roles
se invertían en nuevas etapas reencarnatorias, el nuevo
hombre “olvidaba” conscientemente su antiguo papel
femenino, para adentrarse como un guante en el nuevo
cuerpo viril. El tiempo ha ido sucediéndose y sin embargo la misión
femenina sigue en su etapa infantil, esperando que
el ser humano la acepte y la integre en su conciencia liberadora,
para que la madurez la implique y la integre
en el estado liberador que le corresponde.
La feminidad no es débil, ni frustrante, ni cobarde. El cristo mostró en todo su esplendor, la perfecta combinación
de ambos aprendizajes experienciales. Si Él no
hubiese “reconocido” su feminidad formadora, no habría
tenido la fuerza necesaria para equilibrar los contrastes
perturbadores que le eran constantemente
enviados por los espíritus aún infantiles pero inmersos
en la rebeldía. La función de la mujer era fomentar la práctica de
los valores espirituales no descubiertos en la vida animal.
La suma de experiencias a lo largo de las diferentes
etapas evolutivas, creó un periespíritu de acuerdo con la
formación grosera del entendimiento bruto, la implicación
de un nuevo conocimiento sometía al ser a unas directrices
firmes pero seguras de comportamiento mediante la adquisición de un pensamiento único en raciocinio
y lógica.
La separación de los sexos tiene su sede en la función
distintiva de ambos hemisferios cerebrales, representando
los diferentes aspectos a desarrollar. Mientras
uno representa la lógica y lo concreto, el otro, manifiesta
la sensibilidad y la abstracción. La consideración
materialista ha optado por ensalzar y promover todo
aquello que era “seguro y lógico” en su pequeño universo,
potenciando y sobrevalorando la virilidad en
todos los ámbitos terrestres. No fue así con la otra parte
de la inteligencia, que enlazada a la inteligencia inconsciente,
es portadora de una herencia divina, incapaz de
rebelarse sin el desarrollo aportado por los pasos adecuados
para su adquisición. esta parte femenina es la
que permanece atrasada, sometida a un desfase ilegítimo.
La actividad humana debe encaminar sus pasos
en la consecución y desarrollo de la feminidad cerebral,
adoptando posturas de pensamiento que propicien la
eclosión del despertar inconsciente causante del sueño
conciencial que no permite la aceptación del otro yo.
La mítica búsqueda de la alma gemela fue una
propuesta inconsciente del propio espíritu para asegurarse
en un futuro que el trabajo humano sería completado.
en su ingenuidad infantil, el individuo se propuso
buscarla en el sexo opuesto, encaminando sus pasos físicos, aunque no psicológicos hacia un territorio tan incompleto
como el suyo propio. El resultado obtenido a
lo largo de las múltiples experiencias del ser, ha demostrado
que el alma gemela no existe. este “no” sin embargo
no es una negación rotunda y absoluta, más bien
un “no” relativo, tomado en un sentido horizontal por
el cual el ser individual equivocó la dirección de esa
búsqueda.
la psicología profunda de Joana d´Angelis, nos
descubre la necesidad de buscar en nosotros mismos,
no en sentido figurativo, sino real. el cerebro libra la
batalla milenaria por adaptarse a las necesidades imprescindibles
en la lucha espiritual, una lucha que debería
ya, haber armonizado ambas estructuras
cerebrales e integrado en el propio espíritu al hombre y
a la mujer.
La fase actual se ha visto ralentizada por la
pervivencia del pensamiento macho, que no hombre. el
hombre/mujer tiene que despertar del sueño hipnótico
del poder y la fuerza para unirse a su alma gemela en
una interacción mente-espíritu.
Longina
-Revista Actualidad Espiritista-
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.El objeto esencial del Espiritismo es el mejoramiento de los hombres. No es necesario procurar sino lo que puede ayudar al progreso moral e intelectual.
- El Espiritismo en su más simple expresión-
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CIRUGÍAS ESPIRITUALES
En medio de un mundo de visión materialista, fue preciso por algún tiempo que las cirugías espirituales ocurriesen con corte y correr de sangre, para que el hombre no pensase que el mundo estaba restringido solamente a la dimensión material. Pero ahora los Espíritus ya no se preocupan de mostrar lo que pueden hacer; desean, sí, que la humanidad desarrolle una conciencia cósmica y principalmente el Amor para con el semejante de forma espontánea, sin tener que dar pruebas materiales de la existencia de la espiritualidad Superior, pues el mundo no está restringido solamente en los horizontes de aquello que vemos.
Los Médicos del Espacio profundizan en lo que es discutido en el capítulo "Materialización y Desmaterialización", del libro Terapia de Vidas Pasadas- Un viaje en el tiempo para desatar en nosotros el Inconsciente (Edit. nueva Era), de la terapeuta carioca Célia Rosende. Al contrario de lo que en general se hace en muchos centros de base espírita, en las operaciones con los médicos del espacio realizadas en el Lar de André Luiz, no hay uso de instrumentos cortantes. Normalmente dos procedimientos son adoptados : al trabajar incorporado en el cuerpo del médium, la entidad usas sus dedos para presionar y abrir la piel del paciente, retirando la parte afectada, como tumores. Puede darse también la desmaterialización de la parte enferma y su rematerialización en las manos del médium o dentro de un recipiente cualquiera, como una caja de goma-espuma. Participantes de esas reuniones vieron hasta los tejidos enfermos como salían fuera del cuerpo a través de los poros de la piel del paciente.
En el fondo la parte afectada no precisaría ser rematerializada. Médicos del espacio explican que acostumbran a mostrar los tumores y otras partes retiradas, en vez de desmaterializarlos por completo, solo para que la persona operada vea con los propios ojos y pueda así ayudar en su cura y "avivar su fe", al percibir que algo fue realmente retirado de su cuerpo.
Esos complejos procedimientos de desmaterialización y rematerialización, aún desconocidos por nosotros, son hechos en el Lar por varios espíritus que trabajan con la medicina del espacio. La "gran razón" para la existencia de las reuniones de materialización de espíritus, siempre en las mañanas del sábado, de quince en quince días, es para darse más esperanza de cura para los que buscan ayuda o también un importante alivio para los que están próximos a desencarnar.
Cuando algún doliente tiene percepción de la realidad del Espíritu, tiene la esperanza en la verdadera vida, que es la Vida Eterna. Entonces comienza a soportar su dolor. Por eso es que existe la sesión de materialización. No es para mostrar a nadie que el Espíritu se materializa y trae luz. Es para aquellos que no tienen más esperanzas, son tocados por aquellas revelaciones, renaciendo de nuevo la esperanza perdida. Muchas veces, en esas sesiones especiales, el ser se materializa, proyecta un potente haz de luz sobre el cuerpo del doliente e inmediatamente la parte enferma surge dentro de un recipiente. En algunas operaciones, seres materializados usan aparatos astrales sofisticadísimos, emitiendo colores variados. Son aparatos que pueden polarizar el rayo laser o incluso emitir rayos superiores al laser para hacer el corte la restauración y la asepsia de las áreas adyacentes contaminadas.
La concienciación del indivíduo sobre la causa de la dolencia ayuda a acelerar el proceso de cura de forma más consciente. El microcosmo dentro de este laboratorio corpóreo (cuerpo físico) tiene condición de organizarse con la ayuda del mundo energético o espiritual. Este tratamiento es independiente de la fe, religión, creencia o filosofía de vida. Durante el tratamiento es importante que el indivíduo esté abierto a los cambios necesarios, para que la inversión en sí mismo lo haga una persona mejor. El hombre es un gran laboratorio plasmador,receptor, emanador de las energías. Las dolencias son plasmadas inconscientemente a través del cuerpo emocional , que es de los cuerpos, el más dificil de ser equilibrado.
La cobranza en todos los sentidos ha sido el vehículo de las somatizaciones grabadas por sus glándulas, dependiendo de como el indivíduo recibe cada emoción. Consideramos el cuerpo físico como un aparato que comporta una carga de energía (pensamientos y sentimientos), cuando esa carga es exagerada, la hipófisis (glándula pituitaria), transfiere el exceso de esta carga para los órganos en un intento de ayudar al cuerpo físico a no tener un choque fulminante, la glándula divide esta carga para los órganos. Muchas veces no soportan el exceso y se damnifican generando la aparición de otras dolencias. Después de la concienciación los médicos espirituales utilizan el bate de cristal para rehacer o religar el cuerpo energético (cuerpo eléctrico), auxiliando a las células del cuerpo físico para que se rehagan. Durante la cirugía espiritual se utilizan aparatos energéticos traídos del mundo etéreo(otras dimensiones) de modo que hoy ya no hay más cortes en el cuerpo físico.
Existe también la carga emocional gradual y constante que, como una simiente,va germinando poco a poco, hasta quedar como un árbol grande, es el caso de muchas dolencias que cuando aparecen ya están en un estado muy avanzado; esta carga energética proviene de rencores, odio, rebeldía, nerviosismo, desestructuración del DNA, causando el crecimiento del tejido desordenado, surgiendo así la dolencia psicosomática.
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Las dolencias y sus causas
AGMIGDALITIS: Emociones reprimidas, creatividad sofocada. ANOREXIA: Odio a lo externo de si mismo. APENDICITIS: Miedo a la vida. Bloqueo del flujo de lo que es bueno. ARTERIOSCLEROSIS: Resistencia. Negativa a ver el bien. ARTRITIS: Crítica conservada por largo tiempo. ASMA: Sentimento contenido, lloro reprimido. BRONQUITIS: Ambiente familiar inflamado. Gritos, discusiones. CANCER: Angustia profunda, tristezas mantenidas por mucho tiempo. COLESTEROL: Miedo de aceptar la alegría. DERRAME: Resistencia. Rechazo a la vida. DIABETES: Tristeza profunda. DIARREA: Miedo, rechazo, fuga. DOLOR DE CABEZA: Autocrítica, falta de auto-valoración DOLOR DE RODILLAS: miedo de recomenzar, miedo de seguir al frente. MIGRAÑAS : Rabia reprimida. Persona perfeccionista. FIBROMAS: Alimentar angustias causadas por el socio (a). FRIGIDEZ: Miedo. Negación del placer. GASTRITIS: Incertidumbre profunda. Sensación de condenación. HEMORRÓIDES: Miedo de determinados plazos. Rabia del pasado. HEPATITIS: Rabia, odio. Resistencia a los cambios. INSOMNIO: Miedo, culpa. MENINGITIS: Tumulto interior. Falta de apoyo. NÓDULOS: Resentimento, frustración. Ego herido. PIEL (ACNÉ): Individualidad amenazada. No aceptación de si mismo. NEUMONIA: Desespero. Cansancio de la vida. PRESIÓN ALTA: Problema emocional duradero no resuelto. PRESiÓN BAJA: Falta de amor cuando fue niño. Derrotismo. PRESIÓN DE VIENTRE: Preso al pasado. Miedo de no tener dinero suficiente. PULMONES: Miedo de absorber la vida. QUISTES: Alimentar angustias. Falsa evolución. RESFRIADOS: Confusión mental, desorden, angustias. REUMATISMO: Sentirse victima. Falta de amor. Amargura. RINITIS ALERGICA: Congestión emocional. Culpa, creencia en ser perseguido. RIÑONES: miedo a la crítica, al fracaso, decepción. SINUSITIS: Irritación con la persona próxima. TIROIDES: Humillación. TUMORES: Alimentar angustias. Acumular remordimientos. ÚLCERAS: Miedo. Creencia de no ser lo bastante bueno. VARICES: Desaliento. Sentirse sobrecargado.
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